Su obra muestra una revisión sobre el diálogo con la arquitectura y cómo el dibujo y la pintura son capaces de adaptar un lenguaje que abarque las posibilidades que ofrece el medio.
La artista plantea cuáles pueden ser los límites que generan los espacios arquitectónicos dentro y fuera de áreas no habitadas, haciendo referencia a la resistencia frente a la transformación constante de las periferias de las ciudades, además de a su influencia, que puede afectar a nuestra identidad como ciudadanos.
